No incumbe su responsabilidad a un hombre ni a un gobierno. Es
la herencia recibida de la Madre Patria, que conservamos fielmente, a pesar de
haberla hallado controvertida y de que nuestra corta bien que dolorosa
experiencia la condena. Avanzar por medio de líneas artificiales y
permanentes para ir conquistando zonas sucesivas: tal es el sistema
español de frontera, reducido a su expresión más sencilla.
Lo pone de manifiesto una ligera ojeada sobre el mapa de Buenos Aires.
Los españoles marchaban previsora y firmemente, llevaban
sus armas y la colonización al desierto, clavando la cruz y levantando la
escuela al lado del fortín, como bases de la fundación de pueblos.
Así, la mayor parte de nuestros centros de población rural,
derivan de antiguas guardias, que ocupan en el mapa direcciones
armónicas, formando líneas paralelas de Noroeste a Sudeste, rumbo
general de la Conquista en su movimiento de avance tradicional sobre la
pampa.