Escena X
Agata Tijónovna y Gevákin.
Gevákin: (Aparte). ¡Prometió ponderarme y en cambio me llenó de insultos! ¡Qué individuo extraño! (En voz alta). Señora usted no debe creer...
Ágata Tijónovna: Disculpe, no me siento bien... Me duele la cabeza. (Quiere irse).
Gevákin: ¿Quizás no le gusta algo en mí? (Señalando su cabeza). No se fije en esta ligera calvicie: no tiene importancia, fueron unas fiebres; pronto me crecerá aquí el pelo.
Ágata Tijónovna: Tanto me da lo que usted tenga ahí.
Gevákin: Yo, señora... cuando me pongo el frac, el color de mi tez es mucho más blanco.
Ágata Tijónovna: Mejor para usted. ¡Adiós! (Se va).