La mente del hombre ha sido distraida de la realidad con
explicaciones ficticias. No se puede hacer nada para cambiar la vida pasada, así
que se tiene que sobrellevar. Increíbles sectas religiosas se dieron en Oriente,
que ninguna persona razonable podría aceptar, pero sin embargo millones las han
seguido. Por ejemplo, los jainas creen que ninguna mujer puede alcanzar la
iluminación con su cuerpo, pues no puede ser realmente célibe; no puede detener
su menstruación y ésta la hace permanacer como un ser sexual. Así que á menos
que la obtenga siendo sumisa, agradable, religiosa, sirva a su marido y acepte
todo como parte de su suerte... ésta es la única forma de nacer como un hombre
en la vida futura.
Así pues, no puede hacerse nada ahora; una simplemente tiene
que aceptar y estar contenta. Cualquier rebeldía puede echar a perder las
oportunidades, inclusive futuras. Cualquier descontento, cualquier frustración,
puede no sólo destruir el presente, sino también el futuro. Por eso, lo mejor y
más inteligente es quedarse callada. Nadie te puede ayudar, pues cometiste
errores en la vida pasada. Aun cuando tu pobreza no tenga nada que ver con tu
vida pasada... Pero ese descubrimiento es muy reciente y no ha penetrado todavía
en la mente oriental.
Y tal como las mujeres tienen su menstruación, los hombres
también la tienen; éste es un descubrimiento reciente. Así que, si el período
menstrual impide a una mujer alcanzar la iluminación, se lo impedirá también a
un hombre, sólo que la forma es sutil. En la mujer se expresa de una forma
física: se puede ver la sangre cada mes. Pero si un hombre lleva un diario, se
sorprenderá: cada mes, a los veintiocho días, durante cuatro o cinco días se
pone de mal humor, exactamente como una mujer se irrita y se disgusta por
pequeñeces.
La misma persona no se hubiera disgustado por el mismo motivo
en otra época. Pero en estos cuatro o cinco días... su período es más bien
psicológico; esa es la diferencia. Y es bueno en una pareja saber perfectamente
que cuando la mujer tiene el período el hombre debe ser más consciente, pues
esto está fuera del control de ella. Estará irritable, fácilmente se enfadará y
molestará y estará más regañona.