La restitución de
precios reguladores de mercado, exentos de subvenciones proteccionistas a una
clase social poseedora legal de la tierra, hizo que cayeran los precios de los
medios de subsistencia y las materias primas. Las caídas de los precios de
producción que, excluían la renta de la tierra en su composición, implicaba un
factor de productividad que amplificaba la alteración de la producción y el
consumo en todas las esferas de la división del trabajo.
La abolición de
la ley de granos implicaba:
·
El aumento del poder adquisitivo de los
salarios reales. Este aumento se debe interpretar como un aumento de la
productividad general del sistema competitivo, que se refleja el aumento de la
cuota de ganancia general.
·
El aumento de la masa de materias primas
importadas a precios bajos, combinada con la productividad tecnológica,
originaba mayores cantidades de mercancías a precios unitarios
decrecientes.
·
La superproducción de mercancías se exportaba
a los países de desarrollo económico y político desiguales con respecto a la
metrópoli.
·
La masa de dinero liberada del capital
variable y del precio de las materias primas empujaba la inversión en nuevos
sectores de altas ganancias y escasa concurrencia.
·
Las ganancias altas y la liberación de capital
servían para invertir capital de préstamo en el mercado mundial.
·
Las compras que realizaban los importadores
extranjeros, con este capital de préstamo más los intereses, aumentaba la
demanda metropolitana de bienes de producción, de subsistencia y de
lujo.
·
Con el aumento de la riqueza, las clases
sociales medias se integraban en el sistema democrático mediante una legislación
electoral que aumentaba el censo. Las masas sociales eran porosas a una doble
influencia: la contención del nivel de precios y el traslado de las luchas
sociales económicas a las luchas ideológicas imperialistas.
El librecambio necesitaba de un núcleo socioeconómico de
alto desarrollo industrial, financiero y comercial, a la vez que de un retraso
industrial en los países exportadores de materias primas e importadores de
productos industriales.
La agricultura no
capitalizada y la industria gremial de los países subdesarrollados debían
reordenar sus sectores económicos: favoreciendo la producción de materias primas
exportables e importando productos manufacturados.
Los sectores de
producción textil gremial de los países dependientes fueron desapareciendo,
incapaces de competir con los precios de los productos importados de los países
industrializados.