Murió en 1939, a las 3 de la madrugada del día 23 de
septiembre, en Londres, donde se había exiliado un año antes, a instancias de
muchos de sus amigos, para librarse y librar a su familia de la persecución
nazi.
Su casa familiar en el barrio de Hampstead, en la calle
Maresfield Garden 20, es también hoy Casa Museo de Sigmund Freud y
de su hija Anna Freud.
¿Importa hoy el Psicoanálisis?
Se podrían aducir textos confirmativos y estimulativos. Por
ejemplo, este de Carlos Gustavo Jung, delfín de Freud y disidente después,
persona muy fascinada por lo esotérico, espiritual y transpersonal: "Quien
haya llegado a conocer el Psicoanálisis ha comido del árbol del Paraíso y ha
adquirido la sabiduría" (1907).
O éste de Oscar Pfister, sacerdote protestante y discípulo de
Freud, que había afirmado que el deseo de su maestro era que el Psicoanálisis
llegase a ser una" profesión de ?curadores legos del alma?, que no tuviesen
que ser necesariamente ni médicos ni sacerdotes": "Freud ha ideado un
?microscopio del alma?, que permite observar y comprender las raíces de las
funciones mentales, y su desarrollo y dinamismo".
Puedo añadir un texto de Janet Malcom, de su libro
Psicoanálisis, una profesión imposible: "Estalló en la vida intelectual,
cultural y social de nuestro siglo como ninguna otra fuerza cultural lo había
hecho, tal vez no sea exagerado afirmarlo, desde el cristianismo".
Un documento de interés sobre la vigencia actual del
Psicoanálisis como el gran instrumento intelectual para investigar y explicar el
funcionamiento de la mente está en el libro Teoría de la técnica
psicoanalítica de Menniger y de Holzman: "Como experiencia terapéutica,
el psicoanálisis bien podría recomendarse a los médicos, psicólogos, sociólogos,
educadores, profesores, trabajadores sociales, antropólogos, historiadores,
abogados, científicos, políticos, artistas creativos, clérigos y a todos los que
de algún modo se ocupan de la mente humana".
En 1924 Anna Freud le escribió a su amigo Max Shiller (que
había quedado viudo y estaba practicando un Psicoanálisis para serenarse
y replantear su vida):"Me alegro muchísimo de que haya empezado a ser un poco
psicoanalista. No hay momento ni límite de edad para el placer y el provecho que
uno saca de mirarse a sí mismo y a los demás de esta manera. Hasta ahora es lo
único que conozco que puede volver fácil esta vida tan complicada".