-¿Has visto esta noticia? - dijo Carlos, contestando con otra pregunta y presentándole el periódico.
-Sí. Yo mismo lo he mandado publicar.
-¡No puede ser! ¿ O es que me destituyes, que me quitas de buenas a primeras el pan de mis pobres hijos?
-¡Cómo de buenas a primeras! ¿Cómo que te quito el pan? ¡No me vengas con historias! ¿ Cuánto tiempo hace que te nombré Administrador General de Aduanas?
-Va para un año.
-¡Y no te basta con eso! ¿ Cuánto has ahorrado?
-Ni un vintén.
-¡No es posible!
-El sueldo no es grande, y los gastos son muchos. ¡Saldré del empleo como entré en él, con una mano atrás y otra adelante!