En mi experiencia, libros como "El Profeta" son más sagrados
que vuestros así llamados libros sagrados. Y dado que estos libros son
auténticamente sagrados, no han creado una religión alrededor de ellos mismos.
No te dan ningún ritual, no te dan ninguna disciplina, no te dan ningún
mandamiento. Simplemente te permiten tener un atisbo de la misma experiencia de
lo que le ha sucedido a él.
La experiencia total no puede ser puesta en palabras, pero
algo... quién sabe no toda la rosa, pero unos pocos pétalos. Ellas son prueba
suficiente de que la rosa existe. Simplemente tu ventana tiene que abrirse, así
la brisa puede algunas veces traer pétalos.
Estos pétalos llegando a través de la brisa a tu ser, son
realmente invitaciones de lo desconocido. Dios te está llamando a un largo
peregrinaje. A menos que realices el peregrinaje, permanecerás sin sentido,
arrastrándote de alguna forma, pero no viviendo realmente. No tendrás la risa en
tu corazón.
Kahlil Gibran evita su propio nombre creando un nombre
ficticio, Almustafá. Ese es el comienzo de "El Profeta". Almustafá es el
profeta. Almustafá, el elegido y bienamado, que era una aurora en su propio día,
había esperado por doce años en la ciudad de Orphalese al navío que debía
llevarlo de vuelta a la isla de su nacimiento...
Las grandes verdades sólo pueden ser dichas en parábolas.
Almustafá es simplemente un nombre ficticio. ¿Porqué es llamado "el elegido y
bienamado"? ¿Porqué se dice que es una aurora en su propio día? Porque esperó
doce años...
Todo el secreto de Almustafá está en la espera.
No estaba apurado, no exigía, no pedía. Simplemente esperaba.
Para esperar uno necesita una inmensa confianza en que pase lo que pase, no
importa. Si tu espera es total, tu barco algún día volverá para llevarte de
vuelta a tus orígenes, a la fuente de la vida, amor, risa.
Cada semilla sólo tiene que aprender una cosa: esperar para la
estación correcta para que la primavera llegue. No hay nada que la semilla pueda
hacer. No puede traer la primavera, la primavera llegará a su propio tiempo.