Lao Tse golpea fuerte. La lógica de mahavir puede ser
comprendida incluso por los ciegos, pero para comprender la lógica de Lao Tse
tendrás que crearte ojos. Es una lógica muy sutil, no es la lógica ordinaria de
los lógicos -es la lógica de una vida oculta, una vida muy sutil. Todo lo que
dice es aparentemente absurdo, pero en lo profundo, existe una gran coherencia.
Hay que penetrar en ello; uno debe cambiar su propia mente para comprender a Lao
Tse. A Mahavir puedes comprenderle sin cambiar tu mente en absoluto; tal y como
eres, puedes comprender a Mahavir porque él está en la misma línea. Por muy
delante de ti que esté, incluso si ha alcanzado la meta, está en la misma línea,
en el mismo sendero. Cuando intentas comprender a Lao Tse, él se pone a
zigzaguear. A veces le ves yendo al Este y a veces yendo al Oeste, porque él
dice que el Este es el Oeste y el Oeste es el Este, están juntos, son uno el
cree en la unidad de los opuestos. Y así es la vida. De forma que Lao Tse es
sólo un portavoz de la vida. Si la vida es absurda, Lao Tse es absurdo; si la
vida lleva consigo una lógica absurda, Lao Tse lleva consigo la misma lógica.
Lao Tse simplemente refleja la vida. No le añade nada, y no elige nada de ella.
Simplemente acepta, sea lo que sea.
Es sencillo ver la espiritualidad de Buda, muy sencillo; es tan
extraordinaria que es imposible no reparar en ella. Pero es difícil ver la
espiritualidad de Lao Tse porque él es tan ordinario, es como tú. Tu capacidad
de comprensión tendrá que crecer. Si Buda pasa a tu lado, le reconocerás
inmediatamente -ha pasado un ser humano superior. Tiene el encanto de un ser
humano superior, así que es difícil no reparar en él.
Pero con Lao Tse... él puede ser tu vecino. Puede que le hayas
estado pasando por alto porque es tan ordinario, tan extraordinariamente
ordinario. Y esa es su belleza. Ser extraordinario es sencillo: sólo se necesita
esfuerzo, refinamiento, hay que cultivarse. Es una profunda disciplina interna.
Puedes hacerte muy, muy refinado, absolutamente extraterreno, pero ser ordinario
es en realidad lo más extraordinario. Ningún esfuerzo servirá -es necesario el
no-esfuerzo. Ningún tipo de práctica servirá, ningún método, ningún medio
servirá para nada, sólo la comprensión. Ni siquiera la meditación servirá. Para
convertirte en un Buda, la meditación servirá. Para convertirte en un Lao Tse,
ni siquiera la meditación servirá -sólo la comprensión. Sólo el comprender la
vida tal como es y vivirla con coraje; no escaparse de ella, no ocultarse de
ella, enfrentarla con coraje, sea lo que sea, buena o mala, divina o maligna, el
cielo o el infierno.