 |
  |
 |
||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
|
||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||||
| Páginas 1 (2) 3 4 |
|
"Buscando mis amores, iré por esos montes y riberas, ni cogeré las flores, ni temeré las fieras, y pasaré los fuertes y fronteras." ("Cántico espiritual") En ese recorrido que se describe en el "Cántico" yo distingo tres etapas: En la primera etapa, el místico poeta descubre a Dios mirando las cosas de la naturaleza, que están vestidas de su hermosura. "Mil gracias derramando, pasó por estos sotos con presura, y, yéndolos mirando, con sola su figura vestidos los dejó de su hermosura." ("Cántico espiritual") En esta búsqueda ansiosa, va el poeta encontrando los rastros que Dios, el Amado, ha dejado en sus creaciones ("criaturas"). "Y todos cuantos vagan de ti me van mil gracias refiriendo, y todos más me llagan, y dejánme muriendo un no sé qué que quedan balbuciendo." |
| Páginas 1 (2) 3 4 |
|
Consiga Juan Ramón Jiménez, un dios desconocido de Fernando Jiménez Hernández-Pinzón en esta página. |
 |
| ||||||||||
