https://www.elaleph.com Vista previa del libro "Capitán Hierro" de Santiago Salcedo (página 3) | elaleph.com | ebooks | ePub y PDF
elaleph.com
Contacto    Martes 21 de mayo de 2024
  Home   Biblioteca   Editorial   Libros usados    
¡Suscríbase gratis!
Página de elaleph.com en Facebook  Cuenta de elaleph.com en Twitter  
Secciones
Taller literario
Club de Lectores
Facsímiles
Fin
Editorial
Publicar un libro
Publicar un PDF
Servicios editoriales
Comunidad
Foros
Club de lectura
Encuentros
Afiliados
¿Cómo funciona?
Institucional
Nuestro nombre
Nuestra historia
Consejo asesor
Preguntas comunes
Publicidad
Contáctenos
Sitios Amigos
Caleidoscopio
Cine
Cronoscopio
 
Páginas 1  2  (3) 
 

Haciendo caso de su consejo, tal vez porque como estaba intensamente iluminado, me resultaría mucho más fácil su búsqueda, me enfrasqué en la tarea de ir tomando algunos viejos tomos, a los que tenía que palmotear como si fueran viejos amigos, no sé si para despertarlos de su profundo olvido o para quitarles el polvo acumulado a través del tiempo.

La operación se fue repitiendo: coger libro, palmotear, hojear y dejar. Así uno y otro, siguiendo la zona alumbrada por el sol siempre cambiante. Guiado por su luz, pues, y nunca mejor dicho, llegué hasta el final de la estantería. Cuando iba a abandonar la comodidad de la claridad solar, disponiéndome a dejar en su lugar dos viejos libros que hablaban sobre la rebelión del inca Tupac-amaru, me atrajo uno de tapas de piel sin girar, que estaba caído detrás de donde había sacado estos dos y que por fortuna, gracias a esta operación, había quedado a la vista. Digo por fortuna porque la historia que cuento a continuación, tiene su origen en este hecho fortuito.

Mis manos lo tomaron con la punta de los dedos pulgar e índice. Era tal el polvo acumulado, que de no hacerlo de este modo, me hubiera ensuciado toda la mano. Antes de servirme de él, me agaché hasta casi a ras de suelo y lo golpeé por varias veces contra la pata de la misma estantería, hasta hacerle vomitar y arrojar aquel polvo que había sido, por muchos años, su único alimento. Me erguí lentamente y cuanto alcancé la vertical, me moví hasta ser bañado de nuevo por el luminoso haz de sol, que se había alejado hasta la pared próxima. Me apoyé sobre la misma y lo comencé a ojear. Lo primero que vi al abrir su tapa de piel, que, por cierto, aún conservaba parte del pelo del animal al que perteneció, fue que se trataba de un manuscrito de cuya tapa leí en voz alta su título. Abrí el manuscrito por su primera página y me enfrasqué allí mismo en su lectura.

 
Páginas 1  2  (3) 
 
 
Consiga Capitán Hierro de Santiago Salcedo en esta página.

 
 
Está viendo un extracto de la siguiente obra:
 
Capitán Hierro de Santiago Salcedo   Capitán Hierro
de Santiago Salcedo

ediciones elaleph.com

Si quiere conseguirla, puede hacerlo en esta página.

 



 
(c) Copyright 1999-2024 - elaleph.com - Contenidos propiedad de elaleph.com