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Si examinamos el estado de la capitanía general de Caracas según los principios que acabamos de exponer, se fe que es sobre todo cerca del litoral donde se encuentra su industria agrícola, la gran masa de su población, sus ciudades numerosas, y todo lo que depende de una civilización avanzada. El desarrollo de las costas es de más de 200 leguas. Están bañadas por el pequeño mar de las Antillas, especie de Mediterráneo, sobre cuyas orillas han fundado colonias casi todas las naciones de Europa, que se comunica con muchos puntos del océano Atlántico, y cuya existencia ha influido notablemente, desde la conquista, sobre los progresos de la ilustración en la parte del naciente de la América equinoccial. Los reinos de Nueva Granada y México no se relacionan con las colonias extranjeras, y mediante ellas con la de Europa no española, sino por los únicos puertos de Cartagena de las Indias y Santa Marta, y de Veracruz y Campeche. Estos vastos países, dada la naturaleza de sus costas y el aislamiento de su población en el dorso de las cordilleras, tienen poco contacto con el extranjero. Aún menos frecuentada es el golfo de México, en una parte del año, a causa del peligro de las ventoleras del Norte. Las costas de Venezuela, en cambio, debido a su extensión, su desarrollo hacia el Este, la multiplicidad de sus puertos, y la seguridad de sus aterrajes en las distintas estaciones, aprovechan todas las ventajas que ofrece el mar interior de las Antillas. En ninguna parte las comunicaciones con las grandes islas, e incluso con las de barlovento, pueden ser más frecuentes que por los puertos de Cumaná, Barcelona, La Guaira, Puerto Cabello, Coro y Maracaibo: en ningún lado ha sido más difícil de restringir el comercio ilícito con los extranjeros. ¿Habrá que asombrarse de que esta facilidad de relaciones comerciales con los habitantes de la América libre y los pueblos de la Europa agitada haya acrecentado a un tiempo, en las provincias reunidas bajo la capitanía general de Venezuela, la opulencia, las luces, y ese deseo impaciente de un gobierno local que se confunde con el amor de la libertad y de las formas republicanas?

Los indígenas cobrizos o indios no forman una masa muy importante de la población agrícola sino allí donde los españoles han hallado, en el momento de la conquista, gobiernos estables, una sociedad civil, instituciones antiguas y las más de las veces muy complejas, como en Nueva España, al sur de Durango, y en el Perú, desde el Cuzco al Potosí. En la capitanía general de Caracas la población india es reducida, por lo menos fuera de las misiones, en la zona cultivada. En el caso de grandes disensiones políticas, los indígenas no provocan temores a los blancos y a las castas mezcladas. Evaluando la población total de las siete provincias reunidas en 900.000 almas, para 1800, cálculo que los indios sólo alcanzan a 1/9, mientras que en México alcanzan a casi la mitad de los habitantes.

 
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Hacia el valle de Caracas de Alexander von Humboldt   Hacia el valle de Caracas
de Alexander von Humboldt

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