Luego en un fatídico día la serpiente le ofrece a Eva una nuez del
árbol de la ciencia del bien y del mal, pero Eva dice que prefiere la nuez de
Adán. Luego prueba con una banana... con idéntico resultado. Por fin tiene éxito
con una manzana que come Eva y se la da a comer a Adán (nacen los
intermediarios). Por increíble que parezca Dios se entera después de este suceso
acontecido (¿Estaría durmiendo la siesta?).
Ofuscado los expulsó del paraíso a pesar de que no
habían sido previamente amonestados. La supuesta serpiente veremos después que tenía patas.
Y encima comía fruta y además hablaba. No es lo que se dice una víbora "típica".
Y allí Dios condena a los tres revoltosos: a la serpiente a andar sobre su
pecho, la priva de sus patas. En ése día se crean los ofidios. A Eva la condena a
parir con dolor. A
Adán lo castiga con la dignidad del trabajo
y a hacer pan con el sudor de su frente. Y los
vistió con túnicas de pieles lo cual era un paliativo muy leve después del
castigo terrible que cayó sobre ellos y los descendientes (o sea nosotros).
Luego viene la parte que Eva renuncio a la vicepresidencia
(desde el balcón). Y para que no comieran del árbol de la vida y viviesen para
siempre (¿O sea que antes NO vivían para siempre?) puso querubines con
espadas flamígeras.
Entonces desde esa época debe estar allí el jardín, en la tierra de Edén, con
sus ángeles porteros. En la actual tierra de Saddam. Raro que no lo vayan a
buscar así como buscan el arca de Noé en el monte Ararat (¿O era Arafat?). Es
complicado el tema de por qué a Dios se le ocurrió crear semejante serpiente y
los dichosos árboles de la ciencia del bien y del mal y el de la vida
eterna.
Dios les había dicho a los hombres: "llenad la tierra y sojuzgadla, y señoread en los
peces del mar, en las aves del cielo y en todas las bestias que se mueven sobre
la tierra." Gran declaración
anti-ecologista si las hay.
Luego aparece el hecho curioso siguiente: Eva y Adán tienen como
hijos a Caín y a Abel. Uno labrador y el otro pastor. Ambos hicieron ofrendas a
Dios: los corderitos de Abel fueron bien recibidos por el señor pero el fruto de
la tierra, los vegetales de Caín no le gustaron a YHWH. Se desprende de esto que
Dios no era precisamente un vegetariano. Por envidia (envidia alimentada por
Jehová) Caín mata a su hermano. Y lo castiga Dios. Leemos las declaraciones del
imputado luego de su condena: He aquí
que me echas hoy de la tierra, y de tu presencia me esconderé y seré errante y
extranjero en la tierra; y sucederá que cualquiera que me hallare, me
matará. Esto es impresionante, no se sabe
quién podía ser ese "cualquiera" si en la tierra sólo habitaba la familia de
Adán.