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En este mundo que creamos y vivimos los humanos libres o
esclavos, Hermenegildo Pucheta fue ambos estados alternadamente porque fue un
hombre común y también extraordinario como tú, tangible y virtual; ya que
vibramos paralelamente en el mundo físico y en el no-físico, fuera del tiempo y
del espacio. La antimateria o forma no-corpórea que somos porta
esencialmente un mensaje de belleza y libertad, que viene de nuestra fuente más
profunda, el amor inconmensurable que nos contiene en un abrazo cósmico. Este
mensaje intentará llegarte desde estas posibilidades no-corpóreas y corpóreas,
en el contexto que somos tangibles, que emergen desde el vacío y la
intangibilidad para vivir una conciencia material. Nos encontramos ahora y aquí
en estas líneas como una excusa más para invitarnos a decirlo, escribirlo,
divulgarlo, contarlo suavemente o gritarlo aunque sea en un desierto, porque
haciéndolo, sintiéndolo y creyendo en que hacerlo es más que positivo, abrimos
una posibilidad más de que se haga realidad lo que aparenta ser imposible.
Todo es posible, imposible es una palabra que encierra falsedad, lo que
parece imposible ya está sucediendo. Existieron y existen hoy humanos
extremadamente libres que han sido atravesados por procesos en los que distintos
patrones de necesidad fueron cortados o suspendidos, por ejemplo, los humanos
que ayunan por períodos increíbles de tiempo, aunque ellos aseguran estar
alimentados por otras vías del cosmos, en otro contexto perceptual,
sintonizándose con la retroalimentación celular, o quizás descentrados del
tiempo lineal tal como lo conocemos. También hay personas que levitan y
posiblemente hoy ya se teletransporten y vuelen en el infinito, o transmuten la
materia manifestando formas inimaginables. Como sea, ellos trascendieron los
parámetros cognoscitivos de la ilusión, el mito de la forma, del espacio, de la
mente. Amigos, hermanos, trataremos de entrar en lo inexplicable escribiendo
en primera y tercera persona e intentando explicarlo y exponerlo. Lo haremos
como el humano Hermenegildo Pucheta y como el no-humano Antimateria. Pido
disculpas por la falta de cualidades narrativas, pido paciencia para comprender
y ayudar con la imaginación, con su latido. Aquí vamos juntos, animados y
creyendo en que hacerlo es un grito jubiloso más en el viento de la mente del
tiempo y el espacio. Soy una partícula y una onda pasajera, igual que tú, que
eres yo.
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