|
|
Páginas
(1)
2
3
4
5
6
|
|
INTRODUCCIÓN
El vigor intelectual de ERNESTO RENÁN se corresponde con
el mejor legado del siglo XIX. Su obra fecunda le da ingreso a la galería
de escritores titanes del siglo, junto a Ranke, a Michelet, a Taine -para
mencionar a algunos historiadores solamente-, aunque la materia de sus trabajos
tuvo tal universal alcance y una influencia tan esclarecedora, que su
pensamiento fue durante mucho tiempo un verdadero faro intelectual. Había
sido destinado a la vida religiosa, pero poco antes de tomar los votos
halló que su fe era débil para cumplir cabalmente la tarea que se
esperaba de él, de modo que tres años antes de la
revolución de 1848 era ya un laico que con desusada fruición
vivía el surgimiento de la revuelta social y el nacimiento del
pensamiento sociológico. En los días de la revolución del
48 escribe un primer trabajo, El porvenir de la ciencia (que publicara
cuarenta años después), en momentos en que la amistad con
Marcelino Berthelot lo sumerge en la maravilla de la química y la
biología que vienen sustituyendo a las matemáticas como claves del
entendimiento del mundo. Su tesis doctoral sobre Averroes y el
averroísmo (1856), denota ya un espíritu cuestionador de la
postura del hombre ante la ciencia, actitud que llevará hasta las
ciencias históricas con el gran instrumento -la filología-, de la
que será consumado cultor. Su versación en el mundo bíblico
es el ámbito de especialización que elige, y al finalizar la
década del 50 hace conocer su Historia general de las lenguas
semíticas, después de visitar Tierra Santa, Siria, como
también la Acrópolis. Es profesor de Lenguas Orientales en el
Colegio de Francia en 1862, pero desde su primera lección encuentra seria
oposición al presentar a Jesús como un hombre histórico, en
quien se corporizarían ideas y situaciones de toda una época.
La Vida de Jesús, de 1863, es su libro más conocido,
más leído, más influyente. Llegó a ser conocido por
generaciones de estudiosos y lectores, al presentar el cristianismo como una
evolución de principios religiosos y valores provenientes de la
cosmovisión judía y a Jesús como un ser histórico
excepcional en quien la encarnación de ciertos valores llevará al
trágico y apasionado destino del Cristo en la cruz. Conciliaba y
articulaba así todas las expectativas de las ciencias del espíritu
(a las que correspondía la historia decididamente apartada de las
euforias de las ciencias naturales impregnadas de biología y
sociológía en pos de comprobaciones experimentales), y mostraba de
la mejor y más elocuente manera la trayectoria histórica,
comprobada en innumerables fuentes manejadas por el eruditísimo
filólogo y el resurrector de civilizaciones pasadas, a la luz del recurso
inagotable de la lectura y la crítica bíblicas.
|
|
Páginas
(1)
2
3
4
5
6
|
|
Consiga Cristianismo y Judaísmo de Ernesto Renán en esta página.
|
|
 | |
Está viendo un extracto de la siguiente obra:
|
|
|
Cristianismo y Judaísmo
de Ernesto Renán
ediciones elaleph.com
|
Si quiere conseguirla, puede hacerlo en esta página.
|
|
|
 |
|