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Maria y Poesias completas
de Jorge Isaacs
ediciones
Ramon Sopena
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Edición:
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1957
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Tomos:
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1
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ISBN:
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no tiene
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Medidas:
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14,2 x 19,4 cm
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Estado:
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Bueno
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Género:
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Novela - Clasicos
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Peso:
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230 gramos
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 Reseña del libro
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* Los importes están expresados en dólares estadounidenses.
Política de Devoluciones.
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Descripción del libro usado "Maria y Poesias completas"
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Jorge Isaacs, uno de los más grandes novelistas hispanoamericanos del siglo XIX, nació en 1837, en Cali, en el valle del Cauca, Colombia, a cuya naturaleza primitiva y eclógica debe, sin duda, esa intuición del paisaje que es uno de los atributos de su obra literaria.
Adolescente, se trasladó a Bogotá para cursar estudios; pero la ruina paterna lo arroja a la lucha por la vida, y al combate político su temperamento fogoso y justiciero. Actuó con brillo en el Parlamento y fue destacado colaborador de muchos periódicos nacionales y extranjeros.
Como poeta escribió un centenar de inspiradas poesías y es autor también de tres dramas, pero fue María, publicada en 1867, lo que le valió perenne fama en las letras del Continente y el entusiasta elogo de Juan Valera, el conde de Cheste, Pérez Galdós, Edmundo D''Amicis y otros ilustres literatos contemporáneos. María es una novela de amor, y más que ninguna otra en nuestro idioma, tiene el raro mérito de unir a su valor artístico una popularidad que los años no envejecen. El idilio entre María y Efraín, cuyos primeros momentos son moldeados en el crisol de la adolescencia, adquiere por instantes una refulgencia astral a la que contribuyen, expresados con honda penetración psicológica, la inocencia, la turbación transparente del espíritu inmaduro aún, que se sorprende a sí mismo asomado a los abismos del sentimiento más poderoso y se siente sacudido en la infinitud de un vértigo, en el cual ni María ni Efraín dejan de ser puros, nobles. Isaacs desarrolla la trama en un escenario en el que la naturaleza se prodiga en toda su grandeza, y en el que desenvuelven su vida patronos, esclavos y lebertos. Esta obra tiene numerosos valores tanto estilísticos como esenciales; la sola autonomía lingüística del autor, que sujetó a la simplicidad, le permitió alzar un monumento idiomático de cuya ortodoxia folklórica habla, claramente la necesidad de agregar a la novela un vocabulario con los provincialismos más notables que aparecen en ella. Complementan este volumen un considerable número de composiciones poéticas, que comprenden todas las obras de Isaacs de tal género conocidas hasta nuestros días, algunas de las cuales son el testimonio claro de la exquisita sensibilidad de este espíritu dilecto de América. Jorge Isaacs murió en Ibagué en el año 1895.
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