A modo de
introducción
El café de la
Esquina
Mi
café de la esquina no es un café. Se auto define como Bar
& Restaurant y eso es porque
durante el día va cambiando su piel en función del cambio de demanda que genera
su clientela.
Por
las mañanas es un café de aromas y medialunas. Al mediodía, el almuerzo de menú
es el rey. En la noche, quién sabe como será de noche, nunca he salido sobrio de
allí.
Me
produce cierto orgullo que en el lugar se pueda pedir un tipo de café que lleva
mi nombre y que al entrar me saluden de la misma manera. Es algo que no tiene
precio.