El inspector Lynley, Deborah y sus amigos Helen y Simon pasan unos días en la casa familiar del primero, en Cornualles. Su visita coincide con un hecho que perturba la placidez de la vida pueblerina: el asesinato y castración de Mick Cambrey, un conocido donjuán local. Su muerte, y la posterior de Justin Brooke, biólogo y novio de la hermana de Simon, parecen deberse a las drogas. Pero la investigación de Lynley y Simon desvelará un universo de ambiciones más oscuras, más implacables. Cronológicamente posterior a Pago sangriento y Licenciado en asesinato, ambas publicadas en esta colección, esta novela es anterior en el tiempo ficticio: el principio de las relaciones entre Deborah, Lynley y Simon. Pero su intensidad psicológica y riqueza de su intriga es la misma y por tanto constituye, al igual que sus antecesoras, una gran novela policiaca. UN CRIMEN BRUTAL, UN SUICIDIO: ESTACIONES TERMINALES DEL CAMINO DE LA VENGANZA
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