Entonces Herodes llamó secretamente a los magos e
indagó la fecha en que habían visto la estrella, y
mandándolos a Belén les dijo:
-Id, informaos exactamente acerca de ese pequeñuelo y
cuando lo hayáis encontrado, hacédinelo saber para ir
también a adorarlo.
Pero luego que los magos, conducidos por la estrella, hubieron
encontrado y adorado al niño, advertidos por un sueño de que no
debían volverá ver a Herodes, regresaron a su país por otro
camino. Herodes al verso burlado por los magos fue presa de gran
irritación.