Se cree (y el aspecto del lugar lo confirma) que aquel país
antes no estaba totalmente rodeado por el mar. Pero Utopo, de quien tomó nombre
la isla, por haberla conquistado, ya que antes se llamaba Abraxa, fue quien hizo
que sus moradores, que eran rústicos y muy atrasados, vivieran de manera humana
y civil. Fue él quien mandó formar un istmo de unos diez kilómetros, con lo que
UTOPIA quedó separada de la tierra firme y convertida en una isla. Hizo que
trabajaran en dicha tarea, no solamente los moradores antiguos, sino también los
soldados, y con tan gran número de brazos el trabajo quedó realizado en muy poco
tiempo, dejando admirados a los pueblos vecinos, que al principio se burlaban de
ellos.
Hay en la, isla cincuenta y cuatro ciudades, todas las cuales
tienen en común el idioma, las instituciones y las leyes; y puede decirse que
todas ellas están construidas bajo un mismo modelo, en cuanto lo permite el
terreno. La distancia media entre ellas es, de unos veinte kilómetros, y ninguna
está tan apartada de la más próxima, que en una jornada un peatón no pueda
desplazarse de una a otra.
Tres ciudadanos expertos y venerables de cada una de dichas
ciudades acuden todos los años a Amauroto, ciudad que por estar en la parte
central de la isla es fácilmente accesible a todas las demás y se considera,
como la Capital, por ser donde se tratan las cosas comunes y la ordenación
pública de todo. el país.
El término municipal de cada ciudad viene a tener el mismo
contorno que las otras, unas más y otras menos, según lo apartadas que estén.
Ninguna de ellas desea extender o ensanchar su distrito, por considerarse más
como labradores usufructuarios de los campos que Señores de ellos.
Existen alquerías muy bien provistas de toda clase de
utensilios para las labores agrícolas, y para el trabajo en estos cortijos se
turnan los ciudadanos. Ninguna familia de una alquería agrupa menos de cuarenta
personas, en las que se señala Padre y Madre de familias por edad y por
costumbres venerables. Cada treinta alquerías forman una agrupación y se designa
a una que se considera como cabeza y representante de todas las demás.