-¿Qué significa eso?
-Eso significa que no presumas tanto de tus ideales, y los 
reduzcas a nuestras dimensiones; redúcelos, actúa con 
espíritu de adaptación, y luego, a lo mejor, si es que vemos 
algún provecho... Nosotros, hermano, también somos perros viejos, 
¡y ya hemos conocido proyectistas de esos! Hace unos días, se nos 
presentó el general Krokodílov y nos dijo: 
"¡Señores, mi ideal es el talego! ¡Vengan ustedes!" 
Nosotros, por merced, le creímos, y ahora nos tiene encerrados bajo 
llave.
Aquellas palabras dieron mucho que pensar al liberal. De sus 
primitivos ideales ya no quedaba más que el rótulo, ¡y de 
pronto les colgaban encima la vileza auténtica! "Por este camino -se 
decía-, cuando quieras darte cuenta, te encontrarás tú 
mismo entre los viles. ¡Señor, ilumíname!"
Las personas expertas, al verle tan pensativo, empezaron a 
incitarle por su parte: Ya que tú, liberal, has armado este lío, 
¡déjate de elucubraciones y desenrédalo tú mismo! 
Tú has excitado nuestros apetitos, y tú debes calmarlos... 
¡Actúa! Y comenzó a actuar. Todo lo hacía 
adaptándose a la vileza. Cuando a veces, hay que reconocerlo, intentaba 
escabullirse a un lado, al momento le tiraba de la manga alguna persona experta: 
"¿A dónde miras de reojo, liberal? ¡Mira de 
frente!"