Prólogo
Hacer lo que siempre uno siempre ambicionó, es un objetivo que sólo he podido
alcanzar en el ocaso de mi existencia.
Pero, "nunca es tarde cuando la dicha es buena" por lo cual me animo a
compartir con mis vecinos un tesoro que guardo desde que en el lejano 1956
llegué a General Roca, ciudad que me ha brindado la posibilidad de criar y
educar a mis ocho hijos a los que han seguido veinte nietos.
A todos ellos, sucesores y vecinos, dedico este modesto trabajo que no quiere
ser exhaustivo sino tan sólo un punto de partida para nuevos trabajos de
investigadores más hábiles y escritores de mayor talento literario.
El libro del maestro Cruz A. González llegó a mi poder en forma de
agradecimiento de un viejo historiador rionegrino ya fallecido, a quien obsequié
en el año 1957 un ejemplar de mi obrita "Guía de transporte y turismo del Alto
Valle del Río Negro y Neuquén un trabajo que realicé para la Seccional El Valle
de la Empresa Nacional de Transportes de la Nación, antecesora de la Cooperativa
"El Valle".