La animación sociocultural como práctica dirigida al desarrollo integral de la comunidad se apoya en ciertas premisas y metodologías que permiten hacer de ella un instrumento eficaz del imprescindible autoconocimiento, a partir del cual los diferentes grupos humanos encaran procesos de movilización, organización y transformación de su realidad. Su objetivo último es lograr que los "destinatarios" de las políticas sociales - culturales, educativas, de salud, vivienda, medio ambiente, tercera edad, mujer, infancia, etc. - asuman el rol de actores protagónicos, resolviendo creativa y autónomamente los desafíos que el desarrollo plantea.
En tanto, las "materias primas" de la tarea del animador son las dificultades y problemas, valores y prácticas, esperanzas y potencialidades de grupos humanos concretos, nada más alejado de ella que la improvisación y el amateurismo. Por tal motivo, la formación de animadores socioculturales constituye una preocupación de larga data de diversos organismos nacionales e internacionales.
Este libro sintetiza las contribuciones más completas y significativas del patrimonio de conocimientos forjado por la práctica de la animación sociocultural, ofreciendo una aproximación vivencial y amena, aunque sumamente rigurosa, a tan noble quehacer.
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