Si un calificativo cabe para los poemas de este libro es que son profundos, despojados, construidos secamente, la economía de su lenguaje tiende a esencializarse para que se ensimismen, como una obsesión, sobre el espacio de su búsqueda.
Así, estos poemas eluden con deliberación cualquier barroquismo. Su capacidad de vértigo, inquietud y desasosiego, en cambio, se gesta por los límites de interrogación a que conducen al lenguaje, pero ello está logrado sobre una trama precisa y controlada, sobre una violencia que gira meticulosamente en derredor de su estallido.
El erotismo, la soledad, el cuerpo, la nostalgia de la patria y la derrota política son algunos de sus principales temas. Pero también el poema mismo: los textos investigan su propia producción, la razón de su ser literario, en un movimiento que atraviesa y alumbra a todo el libro.
Libro firmado por el autor.
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