Richard Abernethie muere repentinamente, mientras que un año antes lo había hecho Mortimer, su único hijo. La familia entera se reúne después del funeral para conocer su testamento. Durante la lectura de las últimas voluntades, que satisfacen plenamente a toda la familia, cuando la conversación deriva hacia amables comentarios sobre el difunto, Cora, la hermana del muerto, persona algo desequilibrada e infantiloide, exclama: "Pero fue asesinado, ¿verdad?". Poco después, Cora aparece muerta y el albacea pide ayuda a Hercule Poirot para resolver el caso. Como muchos de sus contemporáneos, Agatha Christie escribió relatos para diversas revistas en los años veinte y treinta, y casi todos ellos acabaron incluidos mas tarde en los libros recopilatorios. 21 años después de su muerte, una labor detectivesca digna de la propia Agatha Christie ha desenterrado siete relatos inéditos, así como las versiones originales de dos relatos de Poirot que la autora amplió después para publicarlos en forma de libro.
Libro número 132 de la Colección.
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Reseña del libro
