|
|
|
|
Mitos sobre las vacunas
Si las vacunas no sirvieran tendríamos polio y rabia. En salud se pueden cometer errores gravísimos en base al desconocimiento. Es común escuchar recomendaciones sobre remedios caseros, o incluso personas que no son médicos y ante una dolencia pueden decir “tomate tal medicamento que se te pasa”. Hay muchas cuestiones sobre las que circulan falsas creencias. Los medicamentos, los diagnósticos y, en particular sobre lo que queremos centrarnos hoy, las vacunas. Todavía hay gente que cree que las vacunas no sirven o que incluso pueden hacer daño. Con el propósito de desterrar todo tipo de falsa información o falsa creencia, hemos recopilado una serie de mitos sobre la vacunación. Los exponemos a continuación: MITO UNO: “Las vacunas no son necesarias y tienen efectos secundarios perjudiciales”. Esto es falso. Las vacunas son seguras y si aparecen reacciones éstas son leves y temporales. MITO DOS: “Las vacunas no sirven para los adultos mayores”. Completamente falso. No hay edad para los beneficios de las vacunas. Muchos piensan que las vacunas que han recibido siendo niños los protegerán para toda la vida, pero la inmunidad se desvanece con el tiempo y, además, con el paso de los años las personas se vuelven más susceptibles a muchas enfermedades. Por otro lado, hay vacunas que no existían cuando muchos adultos eran niños. MITO TRES: “Es mejor desarrollar la inmunidad contra la enfermedad por vía natural, o sea enfermándose, que por medio de una vacuna. Además hay enfermedades como la varicela, el sarampión o las paperas que son parte normal del crecimiento”. Extremadamente falso. Las vacunas interactúan con el sistema inmunológico para generar una respuesta inmune similar a la que produce una infección natural. Pero con la diferencia de que no causan la enfermedad ni ponen a la persona en riesgo de desarrollar sus potenciales complicaciones. La varicela, el sarampión o las paperas son enfermedades que pueden tornarse graves y por lo tanto son consideradas muy peligrosas para el organismo. MITO CUATRO: “La mayoría de las personas que se enferman fueron vacunadas”. También falso. Ninguna vacuna es 100 % efectiva, pues siempre hay un pequeño porcentaje de personas vacunadas que, por razones individuales, no desarrollan inmunidad a pesar de la vacunación. Sin embargo, ese porcentaje es sólo de entre el 5 y el 15 %. ÚLTIMO MITO (CINCO): “La gripe es una enfermedad menor y la vacuna no es eficaz”. En realidad, la gripe no es una simple molestia, porque puede tener serias complicaciones en la salud propia o de nuestro entorno, al contagiarla. Y vacunarse sirve tanto para protegernos a nosotros como a nuestro entorno. En conclusión, si Albert Sabin no hubiera desarrollado la vacuna contra la poliomielitis, hoy habría muchísimos casos. Esto no es así porque en prácticamente todo el mundo se ha vacunado. Otro buen ejemplo es la rabia. Hoy, en las ciudades, es muy difícil ver a perros con rabia, una patología común en otros tiempos. Aquí también las vacunas jugaron un papel fundamental. No debemos temerles ni tener falsas creencias sobre las vacunas. Es solo un pinchazo que puede salvar muchas vidas.
|
|
|
|
Consiga Curar con Opinión: Notas acerca de Medicina y Salud en Argentina de Daniel Cassola en esta página.
|
|
| |
Está viendo un extracto de la siguiente obra:
|
|
|
Curar con Opinión: Notas acerca de Medicina y Salud en Argentina
de Daniel Cassola
ediciones elaleph.com
|
Si quiere conseguirla, puede hacerlo en esta página.
|
|
|
|
|