(Boceto)
-¿Quién pide la palabra?
-Menda.
-Bueno.
¿Cómo se llama usté?
-Gorgonio Méndez. 5
-Puede usté prencipiar.
-¡Diznos hermanos!
(Expectación) ¡Qué grande y qué solezne
es el... la reunión que va a escucharme
lo que voy a decir de los burgueses! 10
(Aplausos.) No vayáis a figurarse
que yo soy orador, pues si lo fuese,
en lugar de llevar la dizna blusa
de peón de arbañil, que veis ustedes,
llevaría, como hacen los ladrones, 15
trajes de doce duros u de trece,
y en vez de hacer ginasia en los andamios,
robaría al obrero impunemente.
(Agitación) -¡Muy bien!
-¡Trabajadores! 20
Yo no soy orador..
(Rumores leves.)
¿Sus molesto?
-¡No! ¡no!
-Pues escuchadme. 25
con cierta educación, si sus parece.
Acaba de decir un compañero
que una huelga de tres o cuatro meses
es lo más apropiao pa que seamos
lo que debemos ser entre la gente, 30
y ha metido la pata, y no quisiera
que el citao compañero se ofendiese.
¿No estáis conformes?
-¡No!
-¡Sí! 35
-¡Fuera!
-¡Que hable!
-Pa que la burguesía se escarmiente
y sepa respetar nuestro derecho
hacen falta navajas de Albacete. 40
-¡No es pa
tanto!
-¡Sí!
-¡No!
-¡Sí! 45
-Me dan nausias
al ver que aún hay obreros que se atreven
a decir salvajás, por el estilo
de la que acaba de decirnos ése.
¿Qué comemos nosotros, trabajando, 50
mal comparao, lo mismo que unos bueyes?
¡Repollo y porquerías que no paran
más de cinco minutos en el vientre!
-¡Eso!
-¡Muy bien hablao! 55
-¡Bravo!
-¿Y los ricos
qué comen mientras tanto? ¡Magras!
-¡Ele!
-¿Y por qué comen magras? Porque semos 60
una recua de burros indecentes,
o peor entoavía, que nos faltan
algunas cosas que los burros tienen.
-Eso es mucho decir.
-Hay esceciones 65
en esto como en too, naturalmente,
y cualisquiera ve que no es preciso
más que fijarse en mi pa convencerse;
pero a lo que yo voy, es a que juntos
o en coleztividaz o, si se quiere, 70
asociaos, en jamás de los jamases
lograremos hacer una que suene.
-Pa mí que está algo errao su señoría,
y perdóneme usté de que le ojete.
¿Qué, no tenemos toos sangre en las venas 75
lo mismo que ca quisque?
-Me parece.
¿Pero qué importa que tengamos sangre,
si luego nos la chupan los burgueses
cuando les vienes bien? 80
-¡Que nos la chupen!
-Mientras haiga gallinas que se dejen
y mientras que no sean los obreros,
endividual y coleztivamente,
capaces de cortar muchas cabezas 85
y de llevarse a casa muchas nueces,
claro que sí lo harán. ¿Pa qué queremos
algunos que se visten por los pieses
y son unos gilís? Aquí hacen falta
hombres con muchos... 90
-¡Bravo!
El Presidente.
-¡Gorgonio, que hay señoras en la sala,
y algunas son honrás, y se resienten!
(Extrañeza.) -Me choca, pero mucho, 95
que un sujeto ilustrao se pitorree
de las damas y gaste ciertas bromas
en un azto tan serio como es éste.
-Oiga usté, so animal, la presidencia
sabe su obligación perfeztamente 100
y no permite que ningún borracho
la dé leciones. (Sensación)
-Si tiene
tanta seguridad su señoría
de que cumple en su puesto como debe, 105
¿por qué, mientras preside a gente seria.
está comiendo chufas y alcahueses?
-Porque me da la gana.
-¡Qué bonito,
y qué dizno, y qué rezto, y qué decente! 110
(Rumores) ¡A mí, Prim!
-Su señoría
es un morral vendido a los burgueses,
que no quedrá tomarse, de seguro,
cuatro golpes conmigo a la intemperie. 115
-¡Y cuarenta y dos mil!
-¡Mentira!
-¡A verlo!
-¡Granuja!
-¡Sin vergüenza! 120
¡So castrense!
(Gritos, golpes, carreras, telón rápido
y fin de este boceto de sainete.)