Una Gota en el Cauce, es la contraseña, a modo de título, con la que Norberto Rizzi pretende llegar al corazón del lector. Y a fe que habrá de lograrlo, porque al tender un puente para el abrazo fraterno con éste, lo hace en base al amor, ofrecido a manos llenas. Pero su cálida propuesta, con ser tan generosa y de por sí sugerente, no resulta exclusiva. Antes bien el autor de este libro, suma de coloridos paisajes interiores y experiencias vitales, también abre vías de comunicación intelectual complementarias con su aguda interpretación de la fenomenología humana. Aun cuando no se compartan algunos de sus juicios. Sutil a veces, explosivo otras, sereno siempre, cuando de asestar sus observaciones se trata, Norberto Rizzi alega, aquí y ahora, esta viviendo ajeno a toda indiferencia con respecto a la suerte del hombre. Y lo hace con un lenguaje premeditadamente sencillo, exento de hojarasca, para que pueda ser claramente entendido. Esta intención de su parte tal vez se explique porque tiene la necesidad cotidiana de llegar al gran público por su condición de periodista profesional o quizá porque está convencido como Elías Castelnuovo, de quien fue amigo, que, "el arte del buen escribir consiste en utilizar el menor número de palabras posibles y evitar la tentación del alarde idiomático". Para arribar, así, al mayor número de lectores. Como quiera que sea, sin rebusques, Rizzi avanza en la dirección que se propone apuntando a la esencia de las cosas y logra rescatar valores que, con ser vertebrales, aparecen hoy en día amenazados de muerte por la confusión organizada y el ruido ensordecedor que produce una vocinglera mediocridad. Enhorabuena, pues, Una gota en el Cause, muestra otros caminos distintos a los que se recorren rutinariamente en esta época de vaciamiento espiritual y lo hace con humildad y elevado propósito. Humanamente.
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